Kleftiko: acantilados en medio de un mar con reflejos impresionantes, cuevas para explorar, todo ello a lo que se puede llegar desde el mar pero también mediante una caminata sencilla de unos 45 minutos. Sea cual sea el medio por el que desee llegar, este lugar permanecerá en su corazón.

Sarakiniko: un tramo de la costa norte se caracteriza por sus rocas blancas alisadas por el viento. Un lugar de aspecto lunar, salvaje y deslumbrantemente mágico para visitar en días de calma pero también cuando el viento sopla con fuerza. Una auténtica maravilla.

Mina de azufre antigua: una mina en desuso en una playa con colores increíbles. El camino te llevará un rato pero serás recompensado por una explosión de colores, desde naranja hasta rojo y óxido. Bañarte aquí te rejuvenecerá por completo.

Klima: pueblo de pescadores colorido con refugios para barcos que se balancean al ritmo del agua. ¡Absolutamente único!

Museo de la Minería, Adamantas: muy interesante, cuenta la historia de la actividad minera tan importante para el pasado y el presente de la isla de Milos.

Plaka: la chora, el corazón antiguo de Milos, con sus calles estrechas y pintorescas callejuelas que se llenan de vida con tiendas y posadas en verano. ¡Sube aquí al atardecer, no te arrepentirás!

Otras playas

Gerondas: preciosa playa de arena oscura, una cala natural con un paisaje fabuloso. Eso sí, lleva zapatillas de deporte, ya que el camino hasta la playa es bastante empinado.

Firiplaka: playa muy larga, hermosa y equipada, adecuada para toda la familia.

Plathiena: Hermosa playa equipada, para disfrutar hasta el atardecer.

Agia Kiriaki: Playa de arena blanca con agua cristalina, de fácil acceso. ¡Realmente relajante!

Papikinou: la playa más cercana al pueblo de Adamas, equipada, adecuada para todos, especialmente para aquellos que gustan del ambiente vacacional.

Firopotamos: pequeña playa junto a un pueblo de pescadores. Es una visita obligada.